Las mañanas/tardes de compras perfectas
Admito que de adolescente iba con mis amistades, pero desde que aprendí a ir sola, adoro poder ir yo a elegir lo que me quiero comprar.
Siempre me gusta mirar, y miles de veces entro sólo para ver qué hay, hacer fichajes. Desde que hay webs, mucho más, aunque desde que me quedé sin ordenador en 2021 no miro tanto. También porque estos últimos años, desde enero 2022 hasta octubre, no ha habido casi nada de mi gusto, al ser diseños más exóticos, diferentes o camaleónicos. Siempre hay los básicos de mi gusto, y prendas caras también, así como ropa de segunda mano en buen estado y casi nueva o nueva con etiquetas de temporadas pasadas que me voy encontrando.
Poder probar si quiero, o no, y llevármelo, elegir algo que online, me lo haya probado o no en tienda, poder disfrutar de la diversidad tanto de pequeño negocio como franquicias, a precios lo más económico posible, outlets, ofertas, rebajas, saldos, etc Y pagármelo yo, con mi sueldo.
Quizás añoro algunas veces que iba en pareja, y había alguna sorpresa, algún regalo, aunque solo me acuerdo que pasase de forma agradable una vez. Quizás la vida me depare de nuevo eso, pero no lo sé, yo no disfruto de una dependencia económica de un hombre, y otras son capaces de eliminarla por Amor, así que prefiero tener el poder de darme yo los caprichos cuando se puede y comprar mis necesidades como propias elecciones.
También comentó que mi interés siempre fue moda en ciudad, alguna vez fuera como en las rebajas de Madrid de 2011, donde fui a Bershka y Stradivarius (no como la Jet Set pero fabulosamente) o a la tienda económica de Barcelona de bragas, parecida a la de San Miguel, aunque fui mucho más feliz comprándolas en Victoria Secret Pink de París, en oferta. Y los días de Promod, tras la salida de Hotelbeds, comprando ofertas emocionada amorosa y textualmente, ya que eran tiempos de cosas de mi gusto. Pero, por norma general, acudir a Zara, Mango, Sfera, El Corte Inglés, Vinted, Calzedonia, Women Secret, Hunkemöller y en algún momento, alguna joyería, o innovar con alguna tienda como Nicole, la de al lado de Gant femenina o Castañer, así como joyerías únicas y buen gusto, económicas, es fantástico. No olvidemos las visitas a Druni, Primor, Xarig y librerías, tanto de segunda mano como Casa del Libro, Carrefour y El Corte Inglés. Y los DVDs, Cex, Amazon, Carrefour, El Corte Inglés... Tedy's, pasable: es tan bonito que da gusto sólo mirar y hay cosas para Lolo fabulosas, y Primark, bueno, a veces ni miro más que los productos de casa o sujetadores de 3 euros que funcionan más que los rellenos.
También hay que hacer otras compras, si, lo sé, pero admito que no paso ni tanto gusto y hasta me duele o molesta, pero como es necesario, se hace. Poco me gusta ir a hacer la compra de alimentación y bebida casi diaria, de electrodomésticos, Conforama, y evito Leroy Merlín y Media Markt todo lo posible porque me cansa...
Y así, vivir en una sociedad económica si es para mí, porque mi materialismo es sano, necesario y no un follón cultural, económico y superficial caótico como han querido vender.
Comentarios
Publicar un comentario