Aquél chico de la clase de Inglés (Andreu S.M.R.)

Sí, era 2015. Me reponía de la boda de mi ex, del gran amor platónico ex político que había sido padre con la chica con la que sólo llevaba un més, y estaba en trabajos puntuales activos. Está vez, hacia entrevistas en los buses, para el Ayuntamiento, sobre su funcionamiento, y empezaba un curso de Inglés diario, nivel B1, que aprobé.

No, al principio no me fijé. No, ni me di cuenta de que había gente de mi edad o similar, ya que estaba muy estresada. Pero dejé de estarlo cuando me pude permitir sólo estudiar sobreviviendo con dinero ahorrado, ayuda culinaria de mis padres y conformándome con pocos hobbies, como leer, gimnasio e internet.

Y sí, un día lo vi en frente de mí, al lado de un puerta, y, aunque no era sexy, era muy interesante. Sus actuaciones en clase eran sublimes y, como yo, era de los que respetaban a la gente mayor, en el buen sentido (no como ahora que muchos de los señores mayores buscan niñas como mujeres y no conocen la amistad o educación entre generaciones), y era una buena época en la que todo florecía y sumaba, era bonito y limpio, estético, variado, y me volví a ilusionar. 

Sí, otra vez soñé, y,  como siempre, me gusta atribuir (esté bien o no, encaje o no) al que me gusta personajes de mi gusto (aunque ahora ya sea la mezcla y, como siempre, vea antes a la persona macho antes que el rol asignado) así como yo el femenino, y claro, era la época en la que estaba viendo "Gossip Girl", estaba yendo a clase, y esperaba un final feliz o historia a lo Dan y Serena, o, como era la buena época de Pitt y Angelina, como ellos. Pero, lamentablemente, no fue, y, aunque intenté contactar con él, no volví a verle. Según me informé, vivía en pueblo con sus padres, tenía carrera universitaria y trabajaba en supermercado.

Pero sí nos escribimos, claro que, buscándole yo primero, y respondiéndome (nos habíamos puesto en la lista de clase los emails y quise sorprenderle, algo que hoy ya no haría por precaución legal, aunque sean muchos de la Justicia quienes se saltan sus normas...). 

A la vez, una compañera, me comentó que salía en un programa de la televisión autonómica de la comunidad. Y sí, no una vez, sino más. Y menos mal que era en un programa de inteligencia. Lo que, pese a cuatro emails, dejó de contestar.

Pero sí, años después volví a escribir, nos contestamos pero la comunicación terminó de inesperado, y la ilusión, o esperanza, también. 

Pero le deseo lo mejor. Y espero esté bien.